Aldeana es la gallina, y cómela el de Sevilla.
Aquella gallina no es buena, que come en su casa y pone en la ajena.
Asna con pollino, no va derecha al molino
Aunque la garza vuela muy alta, el halcón la mata.
Aunque la mona se vista de seda, mona se queda.
Aunque muda el pelo la raposa, su natural no despoja
Ave de pico no hace amo rico.
Ave de pluma, no dejes ninguna.
Ave que vuela, a la cazuela.
El azor, en el palo, y el halcón, en la mano.
El burro, grande, ande o no ande.
El caballo y la mujer, al ojo se han de tener.
Cada pajarito tiene su higadito.
Cada oveja, con su pareja.
Camarón y cangrejo, corren parejo.
Can con rabia, con su dueño traba.
Canta la rana, y no tiene ni pelo ni lana.
Cayó el buho entre las grajas, e hiciéronle migajas.
La coz de la yegua no lastima al potro.
Cría cuervos y te sacarán los ojos.
Cuando el gato no está, los ratones bailan.
Cuando el mochuelo pía, ya es de día.
Cuidados ajenos matan al asno.
De casta le viene al galgo el ser rabilargo.
Del conejo, lo que mira al cielo; y de la pedriz, lo que mira al suelo.
Donde hay yeguas, potros nacen.
En toda tierra de garbanzos, seis gansos y seis gansas son doce gansos.
Escarba la gallina y halla su pepita.
Escarbó el gallo, y descubrió el cuchillo para matallo.
Una espina de besugo puede ser tu verdugo.